CALASPARRA

II Encuentro de Folklore "Villa de Calasparra"

23 de octubre de 2016

En un día de sol reluciente, ya otoñal, compartimos con buena gente nuestra música y nuestros bailes y la forma de hacer fiesta, donde el principal objetivo es el pasarlo bien bailando, cantando, charlando con los amigos y haciendo nuevas amistades.

En el lugar llamado "del convento" o Plaza del Arrocero, nos concentramos con nuestros anfitriones, los miembros de la Rondalla del Club de la 3ª edad de Calasparra y el Grupo Folklorico "La alegría del valle de Ricote" que era el otro grupo invitado.

Desde allí y en un pequeño desfile por las calles de Calasparra, fuimos caminando y, al mismo tiempo, cantando y bailando y las personas eran invitadas a que nos acompañaran hasta el auditorio de Calasparra donde se iba a celebrar la demostración y lo que era en sí el Encuentro.

Bailando en plena calle

En un local prácticamente lleno de público, subimos los primeros al escenario, dos niñas nos presentaron de forma magnífica, leyendo el texto que a continuación transcribimos:

Presentando el Encuentro

"La Cuadrilla de Animeros del Campo de San Juan, El Sabinar y Calar de la Santa, es un reflejo de la cultura musical campesina  y cuyos orígenes se pierden en los tiempos y, que su forma de hacer música y baile, se transmite oralmente de generación en generación, formando parte así del rico patrimonio cultural inmaterial que se conserva, de forma especial, en la zona del Sureste Español.

La Cuadrilla, como la vemos en la actualidad, surge en la década de los ochenta del pasado siglo, siendo formada por personas que viven en las poblaciones de Calar de la Santa, El Sabinar y Campo de San Juan.

En la plaza del Ayuntamiento

Detalle

A través de todos estos años, se han hecho muchísimas actividades, desde la formación de la Escuela de Música Popular, hasta la celebración de numerosos bailes y, de forma especial, podemos señalar la celebración, el último sábado de cada mes de julio, de un ENCUENTRO DE CUADRILLAS DE ANIMEROS EN EL NOROESTE MURCIANO, siendo ya veintiseis ediciones las que llevamos celebradas y por donde han pasado ya cerca de un centenar de Cuadrillas procedentes de todo el Sureste Español, siendo muchas las personas que disfrutan de este tipo de manifestación cultural en las frescas noches del mes de julio en la cima de la Región Murciana.

Pedro de la Rambla cantando 

Esta Cuadrilla durante todos estos años ha y sigue participando en numerosos Encuentros, Festivales, Certámenes, etc. de Música Tradicional que se celebran en el territorio nacional, siendo muy bien recibidos y agasajados por cuantas personas y entidades reclaman su presencia. Han grabado varios discos en formato de vinilo, cassette y CDs, han participado en Cursos de Formación del Profesorado, programas de radio y televisión, así como en otros tipos de eventos.

Son muchos ya los etnógrafos, musicólogos y estudiosos del tema los que han recogido en sus publicaciones la labor de esta Cuadrilla, quedando ya, para la historia, su trayectoria como forma viva del rico patrimonio inmaterial que tienen estas pequeñas poblaciones rurales del noroeste murciano.

Al ser esta una música participativa y popular, las personas que lo deseen, pueden subir al escenario, en cualquier momento, para bailar con nuestras jotas, malagueñas y pardicas.

¡ Que disfrutéis!"

Pronto empezó la música: las jotas, las malagueñas y las pardicas empezaron a sonar..., nuestros boleros empezaron a bailar y pronto, muy pronto el escenario se llenó del publico que quiso bailar.

Los aplausos eran una constante y el público, diríamos que entregado, agasajó de forma extraordinaria a los Animeros que pusieron todo lo que sabían y más para agradar y agradecer esos aplausos sinceros que escuchaban tras terminar cada una de sus músicas.

Es necesario señalar, que por diversos motivos, no todos los miembros de la Cuadrilla pudieron acudir a esta salida, pero a pesar de eso, la música sonó muy bien, así como el cante y no hay nada que decir de los boleros y boleras que nos acompañan, siendo miembros natos de nuestro grupo.

Un buen arroz nos unió en una comida de hermandad y tras unas buenas músicas, nos despedimos.

Nuestro agradecimiento a nuestro buenas amigas y amigos de Calasparra por acordarse de nosotros.

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